50 años de la coronación canónica de la Virgen de Guadalupe

La Virgen de Guadalupe era la única patrona de Canarias que no había recibido la coronación canónica hasta ese momento

Este jueves se cumplieron 50 años de la coronación canónica de la Virgen de Guadalupe. El 12 de octubre de 1973, la patrona de la isla de La Gomera estrenó el trono de plata que se encuentra en la Iglesia de la Asunción y el manto blanco roto que porta estos días.

Hasta ese momento, la Morenita de Puntallana era la única patrona de Canarias que no había recibido este rito litúrgico. Sofía Brito, Cofrade Mayor de la Cofradía Nuestra Señora de Guadalupe, fue testigo de ese acto.

«La cofradía se formó en el 1972, a través del sacerdote que estaba en ese momento en nuestra parroquia, Don Agustín Mendoza, y solicitó a Roma la coronación canónica de la Virgen de Guadalupe», afirma.

Coronación un año más tarde

Sofía Brito añade que les concedieron la petición y al siguiente año, en 1973, «se hizo la Bajada y aprovecharon para hacer la coronación». «Aquello fue una gracia muy grande para nuestro pueblo», concluye.

La Virgen de Guadalupe continuará con su peregrinación por toda La Gomera el 21 de octubre, día en el que será trasladada, de nuevo, por mar, hasta Playa de Santiago.

Devoción por la Virgen de Guadalupe en la solemne misa en su honor

Este pasado martes 10 de octubre llegó uno de los actos más importantes de las Fiestas Lustrales de La Gomera 2023, la Solemne misa en honor a Nuestra Señora Virgen de Guadalupe. 

Tras la misa, comenzó la procesión por las calles de San Sebastián en su trono de plata y portando un manto de color blanco roto que estrenó en su coronación.

La Virgen instalada en la proa de la embarcación, marcando el camino, salió el lunes de Puntallana con el sonido festivo de sirenas y voladores, arribando a la bahía de San Sebastián en torno a las seis de la tarde. En ese momento, se desbordó la alegría y la emoción de las miles de personas que desde primeras horas de la tarde esperaban a la Patrona en la playa, a pesar de las altas temperaturas.